El Big Data ya es un factor diferencial en el eCommerce
El Big Data ya es una realidad y los eCommerce están empezando a aprovechar todas las posibilidades que les ofrece. Desde una mejor experiencia de cliente hasta el ahorro de costes. Te contamos más.

El uso del Big Data permite al eCommerce mejorar el control de los procesos operativos, conocer mejor al cliente y mejorar la toma de decisiones, lo que se traduce como una reducción de costes.
La correcta implementación del Big Data y saber interpretar el ingente volumen de datos que ofrece, supone una herramienta fundamental para hacer crecer un canal de comercio electrónico.
La importancia del Big Data
A través del análisis del Big Data revelan patrones y las tendencias en el comportamiento del consumidor, permitiendo tomar una serie de decisiones basadas en datos. Sin embargo, menos del 0,5% de los datos disponibles son empleados para este fin.
Un estudio de la BARC señala, como algunos de los beneficios que se pueden obtener del uso del Big Dat: la mejor toma de decisiones estratégicas (69%), un mejor control de los procesos operativos (54%), una mejor comprensión de los clientes (52%) y la reducción de costos (47%).
Asimismo, aquellos eCommerce que están impulsados por el análisis de datos, miden y mejoran el análisis de los compradores, el servicio al cliente, la personalización de la experiencia del cliente, proporcionan un proceso de pagos online más seguro y mejoran la publicidad dirigida.
Utilización del Big Data
Mediante el análisis de datos, se puede realizar un análisis del consumidor, elaborando su perfil, y reflejando sus preferencias y hábitos de compra, lo que permite mejorar las operaciones del eCommerce y revelar, incluso, comportamientos de compra inesperados.
Asimismo, hay que tener en cuenta que el servicio al cliente desarrolla un papel muy importante en el comercio electrónico. En este sentido, el 71% de los clientes espera acceder al servicio de la ayuda online en cinco minutos o menos.
Los comercios online minoristas pueden utilizar el Big Data para analizar la experiencia de servicio al cliente, detectando la rapidez en sus tiempos de respuesta, así como identificar y resolver problemas potenciales antes de que el cliente se involucre.